Fernando Moleres

























                          Monje cartujo (Italia 2008)
                          Fernando Moleres  de su trabajo, "Los hombres de Dios"

"En un mundo en el que disfrutar de una hora de silencio es un raro privilegio, todavía se pueden encontrar pequeñas comunidades en busca de la paz espiritual a través del silencio, la humildad y la oración. Así es. como devotos seguidores de diversas creencias encuentran un sentido para sus vidas en las órdenes monásticas, así como refugio para vivir en armonía consigo mismos y con los demás. Sobre todo, anhelan la oportunidad de acercarse a su Dios.  
Durante mi trabajo en los monasterios, me dediqué a la captura de la piedra angular de la vida monástica: la oración. Es ese momento que da sentido a las vidas de aquellos que serían los monjes. La devoción del monje durante la oración es el momento más íntimo, y para mí, el que mejor comunica su fe. Creo que nunca se había hecho fotografías de retrato. El tantas veces citado diciendo que el rostro revela el "alma" no me convence. Un rostro puede ocultar tanto como puede revelar. Nuestra conciencia de un objetivo fotográfico nos convierte en diseñadores y gestores de nuestra apariencia. Tenía que encontrar el ambiente adecuado y asegurarme de que la persona no era consciente de ser fotografiada con el fin de abordar el concepto de la devoción que yo quería transmitir. Los interminables servicios religiosos de los cristianos ortodoxos, dentro de las iglesias con poca luz ofrecen el ambiente ideal para capturar ese momento íntimo. Considero estos retratos como algo "impersonal", la atención se centra en transmitir un estado de ánimo que trasciende el tema."