content in the shallows, burma 2008
Fotografías de Mónica Denevan, de su series "China" y "Burma"
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Un anciano solía permanecer inmóvil durante horas en la iglesia. Un día, un sacerdote le preguntó de qué le hablaba Dios.
-"Dios no habla. solo escucha", fue su respuesta.
-"Bien...¿y de qué le habla usted a Dios?".
-"Yo tampoco hablo. Sólo escucho"
Objetivos y métodos de la práctica del silencio según San Juan de la Cruz y Teresa de Jesús
Practicar el silencio significa trabajar para silenciar el yo, con el propósito de hacernos aptos a aquel conocer que se produce más allá del “yo” y del mundo que el “yo” construye. No se trata de un conocimiento que se pueda adquirir, no se trata de llenar más y más las alforjas, se trata de poder hacer pie en el núcleo de nuestro existir, en la esencia, en el “centro”, que es el Uno, el Absoluto...: “el centro del alma, Dios es”, afirma Juan de la Cruz.
"La Sabiduría de Dios, en que se ha de unir el entendimiento, ningún modo ni manera tiene, ni cae debajo de algún límite ni inteligencia distinta y particularmente, porque totalmente es pura y sencilla. Y como quiera que para juntarse dos extremos, cual es el alma y la divina Sabiduría, será necesario que vengan a convenir en cierto medio de semejanza entre sí, de aquí es que también el alma ha de estar pura y sencilla, no limitada ni atenida a alguna inteligencia particular, ni modificada con algún límite de forma, especie e imagen.
(Subida al Monte Carmelo II,16,7)"
Todos los aspectos de la persona, todo aquello que configura nuestra consistencia personal (entendimiento, memoria y voluntad, si hablamos en las categorías de su tiempo; mente, intelecto, historia personal, memoria individual, sentir, deseo, acción...) deben “reformarse” de la egocentración a la desnudez, al vacío más absoluto, a la libertad de toda forma, para poder encontrarse con lo que no es forma ni figura. Un encuentro que no puede ser otra cosa sino “unión”.
¿Cómo? El salto, sin trampolín, de la egocentración a la desnudez, no es posible. ¿Qué proponen? Trabajar para aumentar ese deseo, esa decisión, para acostumbrar la mente y el sentir a andar ligeros, a la percepción a intuir en el silencio sutil... La práctica consistirá en eso: en ese trabajarse, sutilizarse, reformarse, para hacerse capaz de Aquel, de aquello, que escapa a cualquier forma y cualquier concepto, pero que todo lo es.
"Y así, si acerca del obrar con las potencias sensitivas, que es meditación y discurso, o acerca de lo ya recibido y obrado en las potencias espirituales, que es la contemplación y noticia que habemos dicho, no estuviese el alma empleada, estando ociosa de las unas y de las otras, no había de dónde ni por dónde se pudiese decir que estaba el alma empleada. Es pues necesaria esta noticia para haber de dejar la vía de meditación y discurso. (La dificultad que surge es que esta noticia general de que vamos hablando, es a veces tan sutil y delicada que el alma no la echa de ver ni la siente (Subida II,14, 10-11)"
"(...) De donde se sigue claro que, como el alma se acabe de vaciar de todas las formas e imágenes aprehensibles, se quedará en esta pura y sencilla luz, transformándose en ella en estado de perfección, porque esta luz nunca falla en el alma; pero por las formas y velos de criatura con que el alma está velada y embarazada, no se le infunde. Que si quitase estos impedimentos y velos del todo (...) el alma se transforma en la sencilla y pura sabiduría (...)aprenda el espiritual a estarse con advertencia amorosa en Dios, con sosiego de entendimiento... (Subida II,15)"
Poema 15y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca. Parece que los ojos se te hubieran volado y parece que un beso te cerrara la boca. Como todas las cosas están llenas de mi alma emerges de las cosas, llena del alma mía. Mariposa de sueño, te pareces a mi alma, y te pareces a la palabra melancolía. Me gustas cuando callas y estás como distante. Y estás como quejándote, mariposa en arrullo. Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza: déjame que me calle con el silencio tuyo. Déjame que te hable también con tu silencio claro como una lámpara, simple como un anillo. Eres como la noche, callada y constelada. Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo. Me gustas cuando callas porque estás como ausente. Distante y dolorosa como si hubieras muerto. Una palabra entonces, una sonrisa bastan. Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto. |
«Digáis de ella lo que digáis, ¿cómo vais a tener siquiera la esperanza de acceso a la verdad, tan sólo con palabras? Ni siquiera puede percibirse objetiva ni subjetivamente. De modo que plena comprensión sólo puede llegar a vosotros por un misterio inexpresable. El acceso a ella se llama la «Entrada en el Silencio más allá de toda actividad»
«Tres maneras hay de silencio.
El primero es de palabras, el segundo de deseos y el tercero de pensamiento.
En el primero, de palabra, se alcanza la virtud; en el segundo, de deseos, se consigue la quietud; en el tercero, de pensamiento, el interior recogimiento.
No hablando, no deseando, no pensando, se llega al verdadero y perfecto silencio místico, en el cual habla Dios con el ánima, se comunica y la enseña en su más íntimo fondo la más perfecta y alta sabiduría».
Silencio, ¿dónde llevas"Libro de Poemas", 1921. Federico García Lorca |
"Seas lo que seas, durante algunas horas olvídate de ello por completo. Yo no estoy aquí para decirte que huyas de tu vida ordinaria. Te estoy diciendo la forma y los medios, la alquimia, de transformar lo ordinario en extraordinario. En tu negocio sé un hombre de negocios, pero en tu casa deja de serlo. y algunas veces durante unas horas olvídate incluso de tu casa, tu familia, tu esposa, tus hijos. Durante unas horas estate solo contigo mismo. Sumérgete cada vez más profundamente en tu propio ser. Disfruta de ti mismo, ámate a ti mismo."Meditación. Una introducción a la comprensión contemporánea de la meditación" Osho
Y poco a poco te irás dando cuenta de que está apareciendo un gran gozo sin que haya una causa en el mundo exterior, no causado por lo exterior. Eso es meditación.
Sentando en silencio, sin hacer nada, llega la primavera y la hierba crece por sí sola. Siéntate en silencio y espera la primavera. Llega, siempre llega, y cuando llega, la hierba crece por sí sola. Verás surgiendo en ti, un gran gozo sin ninguna razón en absoluto. ¡Entonces compártelo, entonces dalo a la gente! Entonces tu caridad será interior. Entonces no será tan sólo un medio para conseguir alguna meta; entonces tendrá un valor intrínseco."
Llueve en silencio, que esta lluvia es mudaFernando Pessoa
y no hace ruido sino con sosiego.
El cielo duerme. Cuando el alma es viuda
de algo que ignora, el sentimiento es ciego.
Llueve. De mí (de este que soy) reniego...
Tan dulce es esta lluvia de escuchar
(no parece de nubes) que parece
que no es lluvia, mas sólo un susurrar
que a sí mismo se olvida cuando crece.
Llueve. Nada apetece...
No pasa el viento, cielo no hay que sienta.
Llueve lejana e indistintamente,
como una cosa cierta que nos mienta,
como un deseo grande que nos miente.
Llueve. Nada en mí siente...
"En un mundo en el que disfrutar de una hora de silencio es un raro privilegio, todavía se pueden encontrar pequeñas comunidades en busca de la paz espiritual a través del silencio, la humildad y la oración. Así es. como devotos seguidores de diversas creencias encuentran un sentido para sus vidas en las órdenes monásticas, así como refugio para vivir en armonía consigo mismos y con los demás. Sobre todo, anhelan la oportunidad de acercarse a su Dios.
Durante mi trabajo en los monasterios, me dediqué a la captura de la piedra angular de la vida monástica: la oración. Es ese momento que da sentido a las vidas de aquellos que serían los monjes. La devoción del monje durante la oración es el momento más íntimo, y para mí, el que mejor comunica su fe. Creo que nunca se había hecho fotografías de retrato. El tantas veces citado diciendo que el rostro revela el "alma" no me convence. Un rostro puede ocultar tanto como puede revelar. Nuestra conciencia de un objetivo fotográfico nos convierte en diseñadores y gestores de nuestra apariencia. Tenía que encontrar el ambiente adecuado y asegurarme de que la persona no era consciente de ser fotografiada con el fin de abordar el concepto de la devoción que yo quería transmitir. Los interminables servicios religiosos de los cristianos ortodoxos, dentro de las iglesias con poca luz ofrecen el ambiente ideal para capturar ese momento íntimo. Considero estos retratos como algo "impersonal", la atención se centra en transmitir un estado de ánimo que trasciende el tema."
"Es preciso perderse para empezar a escuchar.
Es preciso hacer el silencio en la escucha y en la mirada para descubrir las formas del silencio.El silencio se escribe, se ofrece a la escucha. En la escritura musical el silencio es figura y cada nota figurada posee su recíproca figura silenciosa, la figura de pausa. Una figura que mide el silencio.
En el lenguaje verbal también se grafía el silencio. Así, los puntos suspensivos dejan colgado el discurso, lo suspenden. Pero el valor de estos puntos depende de la palabra que los antecede.
Tanto el silencio del lenguaje como el silencio que se introduce en la música suelen ser respiraciones que reclaman la atención. Respirar será crear el hueco en el que la atención puede desplegarse. El silencio es entonces como un suspiro, el nombre con el que la tradición francesa del s.XVIII designaba al silencio del valor de una negra en música. El silencio de negra es un suspiro, el de corchea medio suspiro, el de semicorchea un cuarto de suspiro... Y en este suspirar tal vez sea posible modificar la forma en que se escucha, transformar el oído.
Aprender a escuchar, aprender a escuchar el silencio y el sonido van a provocar una autoalteración. Esta es como es sabido, la enseñanza que nos brinda el músico norteamericano John Cage quien de modo magistral enseñó a escuchar las formas del silencio. Unas formas que requieren destruir la grafía del lenguaje, de la memoria, para mostrar que silencio y sonido siempre están en continuidad."